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¡Ruta a tu aire en coche!

Y por fin una Semana Santa fuera de aquí… fuera de España, que es muy bonita pero después de dos años de restricciones, pues ya nos apetecía salir! Y qué mejor destino que nuestro vecino Italiano y su preciosa Toscana.

Preparamos una ruta de cuatro días por la Toscana, empezando desde Florencia y terminando en Bolonia.

1er día

Llegamos temprano al aeropuerto de Bolonia, el vuelo era más económico que a Florencia u otra ciudad toscana. Nos fuimos directas a Florencia, dónde cogimos un Free tour para conocer un poquito la ciudad y su historia… ¡que no es poca!

Desde la Catedral de Santa Maria del Fiore (il Duomo) hasta el Ponte Veccio. Para más info click aquí. Ésta vez hicimos el free tour con Buendía Tours, pero normalmente los reservo en Civitatis, pero no había sitio…

Una vez terminamos el free tour, unas dos horas o así recorriendo las preciosas calles de Florencia, repletas de historia… nos fuimos a comer a Greve in Chanti, fuimos a parar por casualidad a La Cantina, un restaurante que está abierto todos los días, el trato del personal magnífico y la comida de 10. Si pasáis por allí os lo recomiendo. Te invitan a una copa de vino y una ración de pan nada más llegar.

Nuestra ruta proseguía de la siguiente manera:

• Panzano in Chianti, hicimos una cata de vinos en «Le Fonti«, súper recomendable… empezamos la cata sin preguntar el precio… entraban 5 vinos y cata de aceite… cuando nos enteramos que sólo costaba 5€ nos quedábamos alucinadas… de 10!!
• Radda in Chianti
• Castellina in Chianti
• y para acabar en Siena,

hacíamos noche en Siena, nos alojamos por el centro y recorrimos todas sus calles de noche.

2º día

Dedicamos la mañana a desayunar en la Piazzia dei Pali, al solecito, y después callejeamos por todo el centro histórico de Siena. Súper bonita, sus calles, sus tiendas, su gente…

Cogimos rumbo a visitar San Quírico d’Orcia, es un pueblecito enmurallado lleno de tiendas, muy bonito! En el camino encontraréis unos paisajes con efecto «aterciopelados» que en fotos ni se aprecia, pero son espectaculares!

Siguiente parada, Pienza, a 5 minutos en coche de San Quírico d’Orcia, paseamos por todo el pueblecito, es pequeño y con mucho encanto. Alrededor de la muralla hay restaurantes para degustación de embutidos y vinos, muy bonito. Comimos en Trattoria Latte di Luna, atención estupenda y todo riquísimo, os dejo abajo una imagen de la fondue que pedimos ;P Además por cortesía de la casa nos invitaron a degustar queso al ron y de vino, muy peculiar y logrado el sabor.

Después de comer y dar un paseo nos fuimos hacia San Gimignano (a hora y media de Pienza). Llegamos a nuestra habitación a la hora convenida con la propietaria, en Locazione Turistica Totti, la señora es un amor, la atención y el cuidado es Top, inmejorable. La habitación tiene todo tipo de detalles… te hace sentir como en casa y la ubicación es perfecta, en pleno centro dentro de las murallas.

Nada más llegar entendimos por qué dicen que es el pueblo más bonito de toda la Toscana♥♥♥♥

Nos fuimos directas a la Piazza della Cisterna donde se encuentran dos de las heladerías más famosas del mundo… nosotras escogimos Heladería Dóndoli… increíble lo buenos que están los helados, desde la galleta crujiente hasta la textura y temperatura del helado… ¡BRUTAL! Quiero una Dóndoli en Barcelona!!!! Bueno… una en cada rincón del mundo! ;P

Recomiendan subir a la Torre Grossa para ver una espectacular panorámica, no solo de San Gimignano sino también de parte de la Toscana. Nosotras no subimos, pero sí paseamos por alrededor de toda la muralla, se recorre bien y rápido, y es precioso.

3er día

Nos levantamos temprano para desayunar en San Gimignano y dejar la habitación. Para seguir con nuestra ruta:

• Monterrigioni
• Volterra
• Pisa (no podía faltar la visita típica a la Torre de Pisa)
• Moneglia (Cinque Terre)

Desde Pisa nos fuimos hacia Cinque Terre, una zona costera un poco más alejada, pero queríamos ver esos cinco pueblitos que la forman al día siguiente. Dormimos en Moneglia, la habitación nos sorprendió muchísimo, súper bonita, y con unas vistas magníficas. La dueña te trata estupendamente así que la recomiendo, B&B Cà di Bollo.

Por casualidad fuimos a cenar a un restaurante… que para mí, de los mejores en servicio y calidad de las pizzas, Pizzeria Il Ciocco, cerca de la playa, por el centro del pueblo, es un restaurante familiar, y de precio muy asequible.

4º día

Nos fuimos temprano a la estación de trenes de Livanto para aparcar en zona segura y recorrer los pueblos de Cinque Terre en tren. En un día es muy justo para ver los cinco, así que empezamos por el más alejado, en nuestro caso Riomaggiore, y seguimos sobre la marcha.

Para evitar colas en la estación de tren para comprar el billete, se puede comprar online en Trenitalia, tenéis que coger el billete «Carta Multiservizi» (para poder subir y bajar del tren las veces que necesitéis por los 5 pueblos), es válida para ese día. Nos costó 18,20€ por persona.

A nosotras nos dio tiempo de ver:

• Riomaggiore
• Manarola
• Monterosso, éste es el que más nos gustó de los tres, por sus calles adoquinadas, su ambiente, la playa…

En Monterosso comimos en un sitio muy popular, y se tiene la fama bien ganada, platos riquísimos, elaborados y caseros, y muy bien de precio, San Martino Gastronomia.

En Manarola si tenéis tiempo merece la pena subir la montaña Punta Bonfiglio, por sus vistas y el bar que hay en la cima. Nos faltó por visitar Vernazza y Corniglia.

Por la tarde, después de nuestra ruta, nos fuimos hacia Bolonia, dónde pasábamos noche y al día siguiente bien temprano salía nuestro vuelo a Barcelona 😦

Como llegamos antes de cenar, dimos un paseo por el centro de Bolonia, hay muchísimo ambiente de noche, pasear por la zona del mercado y las calles paralelas, si tenéis la ocasión, ¡os sorprenderá!

Os dejo una tabla con la ruta y más información, he dejado los sitios a los que no nos dió tiempo de ir por si vosotros tuviérais tiempo, en el siguiente enlace:

Si tenés dudas, contactarme 🙂